viernes, 20 de noviembre de 2009

Las noches de tormenta, la oscuridad, la soledad, el silencio me daba mucho miedo. Pero para esas noches, cuando tenía mucho miedo, tenía un arma infalible. Cerraba los ojos, los apretaba fuerte fuerte y deseaba con mucha fuerza que pasara la tormenta. Y entonces algo mágico pasaba.Cuando era chica tenía algo que ahora no tengo, algo que tengo que recuperar. Cuando era chica tenía fe.Cuando era chica me escondía del miedo cerrando los ojos y deseaba con el corazón que nada me pasara.

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